CIDH EMPLAZÓ AL ESTADO PARAGUAYO LA REVISION DE CONDENA A JOSE LUIS CHILAVERT
El presidente de la CONMEBOL, Alejandro Domínguez, realizó sendas demandas judiciales por supuesta “difamación y calumnia” a más de media docena de personas que lo calificaron de corrupto. En la mayoría de ellas ganó con dudosos procesos, viciados de groseras irregularidades. Ahora, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), emplazó al Estado Paraguayo, a la revisión de la condena al reconocido ex guardameta José Luis Chilavert, uno de los demandados, quien considera que se violó su «derecho a la libertad de expresión».

El ex No.1 de la Selección Nacional, José Luis Félix Chilavert, fue uno de los demandados por Alejandro Domínguez, quien además querelló a ex funcionarios de la Confederación, a un ex dirigente de la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF), así como también a periodistas que criticaron la gestión del alto dirigente, tanto en la matriz paraguaya como en la CONMEBOL.
Para Chilavert, el Estado Paraguayo, a través del Poder Judicial, vulneró varios artículos de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, al hacer lugar la utilización de los tipos penales de difamación, calumnia e injurias con el único propósito de acallar las críticas hacia el presidente de la CONMEBOL por denuncias de corrupción.

“Las expresiones críticas vertidas por Chilavert, fueron referentes a corrupción e iniquidades, en la CONMEBOL (CONFEDERACIÓN SUDAMERICANA DE FUTBOL) Presidido por el Sr. Alejandro Domínguez, persona pública indudablemente que genera intereses social a nivel SUDAMERICANO y por tanto deberían estar más expuestos y no menos expuesto a las críticas que se realizan en el ejercicio de la libertad de expresión y de opinión”, sostiene una parte del documento.
Chilavert afirma además que su proceso estuvo viciado con la inclusión de pruebas obtenidas de manera ilegal, como por ejemplo, fondos de pantalla autenticados por una escribana “no idónea en temas informáticos, sin pericias técnicas para ese efecto entre otras trasgresiones a las garantías judiciales”.
Sostiene igualmente, que “Paraguay ha incumplido su rol de garante de respetar los derechos y libertades reconocidos en la Convención Americana y a garantizar su libre y pleno ejercicio.
La CIDH dio plazo de tres meses, prorrogable por un mes más (y nada más) al Estado Paraguayo para que responda a todos los cuestionamientos que existen sobre el proceso que derivó en la condena al ex guardameta.
Recordemos que la Sala Penal de la Corte dejó firme la condena de un año de cárcel, con suspensión, para el excapitán de la Selección, José Luis Chilavert, por tratar de corrupto a Alejandro Domínguez, titular de la Conmebol.
OTRO CASO

Otro que también llevó su caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) es el periodista Marcos Ricardo Velázquez, quien fue demandado por Alejandro Domínguez, en dos ocasiones, por los mismos hechos, es decir, por difamación, calumnia e injuria.
En la primera querella, fue condenado a 1 año y 8 meses de prisión, con suspensión de la ejecución, que es el caso que fue elevado ante la CIDH por considerar que fue un proceso viciado con groseras irregularidades para favorecer al dirigente de fútbol.
En la segunda querella, donde el comunicador también fue condenado a 1 año y 6 meses de prisión, con suspensión de la ejecución, un Tribunal de Apelaciones, entendió que efectivamente hubo irregularidades y anuló por completo todo el proceso.

En todos los juicios, Alejandro Domínguez y su abogado Claudio Lovera utilizaron el mismo modus operandi, o sea, plantearon las demandas; se opusieron tenazmente al pedido de pruebas solicitadas por las contrapartes (estado financiero y económico, tributario, testigos); exigieron, sin embargo, exactamente lo mismo de los querellados a lo que los jueces accedieron sin titubear; presentaron pruebas carentes de peritajes técnicos y sin comprobantes de origen; y, finalmente, presentaron como testigos a empleados de la CONMEBOL.
De esta forma, con una parcialidad manifiesta y violando todos los articulados del debido proceso, Domínguez consiguió, de manera más que sospechosa, la condena de todos sus detractores, aparentemente con el único propósito de demostrar cuál sería el destino de quienes lo critiquen.
Es importante tener en cuenta que, en caso de que Chilavert y Velázquez demuestren que Alejandro Domínguez manipuló a la Justicia Paraguaya, con presuntos sobornos u otros tipos de dádivas (entradas a los partidos, viajes, etc.), quién pagará las indemnizaciones tanto al ex guardameta, como al comunicador?. Será Alejandro Domínguez o nuevamente el Estado Paraguayo, es decir, todos los ciudadanos?.
Realmente para analizar la actuación de los magistrados en estos juicios que claramente benefician solo a los poderosos.
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