La Ivermectina, aprobado por la Administración de Medicamentos y Alimentos de los EE.UU. (FDA), tiene un alto inhibidor del coronavirus, según estudios realizados en tierras norteamericanas.
Aunque ahora se están realizando varios ensayos clínicos para probar
posibles terapias, la respuesta mundial al brote de COVID-19 se ha limitado
en gran medida a la vigilancia/contención. En tal sentido, divulgamos aquí que la
Ivermectina, un antiparasitario aprobado por la FDA que previamente
demostró tener actividad antiviral de amplio espectro in vitro, es un
inhibidor del virus causante (SARS-CoV-2), con una sola adición a las
células Vero-HSLAM 2H después de la infección con SARS-CoV-2 capaz de
efectuar una reducción de ARN viral de ~ 5000 veces a las 48 h. Por lo
tanto, la Ivermectina justifica una mayor investigación sobre posibles
beneficios en humanos.
La Ivermectina es un agente antiparasitario de amplio espectro aprobado por
la FDA que, en los últimos años, junto con otros grupos, hemos demostrado tener actividad antiviral contra una amplia gama de virus in vitro. Originalmente identificado como un
inhibidor de la interacción entre el virus de inmunodeficiencia humana-1 (VIH-1), la proteína integrasa (IN) y el heterodímero α / β1 de importina (IMP) responsable de la importación nuclear de IN (Wagstaffet al., 2011). Desde entonces, se ha confirmado que la Ivermectina inhibe la importación nuclear IN y la replicación del VIH-1 (Wagstaffet al., 2012). Se han informado otras acciones de la Ivermectina (Mastrangelo et al., 2012), pero
se ha demostrado que la Ivermectina inhibe la importación nuclear del hospedador (por ejemplo, (Kosyna et al., 2015; van der Watt et al., 2016)) y proteínas virales., incluyendo la proteína no estructural 5 del virus de los simios SV40 (T-ag) y el virus del dengue (DENV) (Wagstaffet al., 2012, Wagstaffet al., 2011).
Es importante destacar que se ha demostrado que limita la infección por virus de ARN como DENV 1-4 (Tayet al., 2013), West Nile Virus (Yang et al., 2020), virus de la encefalitis equina venezolana (VEEV) (Lundberg et al., 2013). ) e influenza (Gotzet al., 2016), y se cree que esta actividad de amplio espectro se debe a la dependencia de muchos virus de ARN diferentes.
De manera similar, se ha demostrado que la Ivermectina es eficaz contra el virus ADN de la pseudorrabia (PRV) tanto in vitro como in vivo, y el tratamiento con Ivermectina ha demostrado que aumenta la supervivencia en ratones infectados con PRV (Lv et al., 2018).
No se observó la eficacia de la Ivermectina contra el virus del Zika (ZIKV) en ratones, pero los autores reconocieron que las limitaciones del estudio justificaron la reevaluación de la actividad anti-ZIKV de la Ivermectina (Ketkar et al., 2019).
Finalmente, la Ivermectina fue el foco de un ensayo clínico de fase III en Tailandia en 2014-2017, contra la infección por DENV, en el que se observó que una sola dosis oral diaria era segura y resultó en una reducción significativa de los niveles séricos de la proteína viralNS1, pero sin cambios en Se observó viremia o beneficio clínico (ver más abajo) (Yamasmith et al., 2018). El agente causante de la pandemia actual de COVID-19, SARS-CoV-2, es un virus de ARN de sentido positivo monocatenario que está estrechamente relacionado con severo coronavirus del
síndrome respiratorio (SARS-CoV).
Los estudios sobre las proteínas SARSCoV han revelado un papel potencial durante la infección en el cierre nucleocitoplasmático dependiente de la señal de la proteína
nucleocápsida del SARS-CoV , que puede afectar la división de la célula huésped. Además, se ha demostrado que la proteína accesoria de SARS-CoV ORF6 antagoniza la actividad antiviral del factor de transcripción STAT1 secuestrando.
Golgimembrana (Frieman et al., 2007). En conjunto, estos informes
sugirieron que la actividad inhibidora del transporte nuclear de la
Ivermectina puede ser eficaz contra el SARS-CoV-2. Para probar la actividad
antiviral de la Ivermectina contra el SARS-CoV-2, infectamos células Vero
/ HSLAM con el aislado de SARS-CoV-2 Australia / VIC01 / 2020 a una MOI de
0,1 durante 2 h, seguido de la adición de Ivermectina 5μM. El sobrenadante
y los sedimentos celulares se recolectaron en los días 0 a 3 y se analizaron
mediante RT-PCR para la replicación del ARN del SARS-CoV-2